MARTES 6 DE NOVIEMBRE DE 2007
EL DIAMANTE DE LA VENTAJA NACIONAL
Elevar la competitividad económica debería ser un componente clave de toda estrategia exportadora nacional. En otras palabras, las iniciativas estratégicas deberían abordar la cuestión de la competitividad no sólo a nivel de cada sector de producto o servicio, sino también a nivel nacional. ¿Por qué ‘nacional’, y no simplemente ‘sectorial’? Primeramente, porque lo que determina la mayor competitividad internacional de un país son factores transectoriales, más que de industria. En segundo lugar, porque las medidas necesarias para aumentar la competitividad varían en función de la etapa de desarrollo económico del país y de las oportunidades que tienen los exportadores.
Refiriéndose al concepto de la ventaja competitiva de las naciones, Michael Porter, Director del Instituto de Estrategia y Competitividad de la Harvard Business School, observó: “La prosperidad nacional no se hereda: se crea.” Los participantes en el Foro Ejecutivo de 2002 convinieron en que, en un mundo de intercambios comerciales cada vez más liberalizados, las estrategias deben concentrarse en generar y mantener las ventajas competitivas.
El “diamante” de la competitividad
Para M. Porter, la ventaja competitiva de un país es su capacidad para incitar a las empresas (locales o extranjeras) a utilizar el país como plataforma para llevar adelante sus actividades. Para determinar las fuerzas y las debilidades competitivas de los países y sus principales sectores, propuso un modelo que se conoció como el “diamante de la competitividad nacional”, un diamante de cuatro “caras”.
Estas “caras” son:
- La existencia de recursos (por ejemplo, recursos humanos e infraestructuras de investigación e información).
- Un sector empresarial que haga inversiones en innovación
- Un mercado local exigente.
- La presencia de industrias de apoyo.
En muchos países en desarrollo, el sector de los recursos es tal vez para los planificadores la única cara del ‘diamante’ capaz de mejorar su competitividad y los resultados de la economía a corto plazo. Esto no debería impedir que los planificadores concierten medidas para mejorar el entorno económico en su conjunto.
Distintos retos para distintas etapas
El desarrollo económico pasa por tres grandes etapas. La estrategia de competitividad nacional debería proponer, pues, una orientación distinta para cada una de ellas.
Etapa del aprovechamiento de recursos
En el nivel más elemental de desarrollo económico, la ventaja competitiva está determinada por los recursos, como una mano de obra de bajo costo o los recursos naturales.
Muchos países en desarrollo y la mayoría de los menos adelantados se encuentran bloqueados en esta etapa. La diversidad de las exportaciones es mínima y suele reducirse a productos de poco valor añadido. La dependencia de los intermediarios internacionales es muy fuerte, y los márgenes, escasos y expuestos a las fluctuaciones de los precios y los términos del intercambio. Las tecnologías se obtienen por importación, imitación y llegada de inversiones extranjeras directas (IED).
En esta etapa, los planificadores estratégicos deberían diseñar mecanismos para atraer inversiones de capital, e invertir a su vez los productos del crecimiento económico en factores más generales de competitividad nacional, como la salud, la educación y las infraestructuras.
Etapa de las inversiones
Representa un nivel superior, en el que los países comienzan a crear ventajas competitivas mejorando sus factores de eficiencia y fabricando productos de complejidad creciente. Se introducen mejoras a las tecnologías importadas, se multiplican las empresas mixtas y se hacen cuantiosas inversiones en infraestructuras relacionadas con el comercio (carreteras, telecomunicaciones y puertos).
En esta segunda etapa, la estrategia exportadora nacional debería centrarse en el perfeccionamiento continuo del entorno empresarial, mediante revisiones de las normativas (régimen aduanero, tributación y derecho de sociedades). Se trata de ayudar a las empresas que se proponen exportar a incrementar sus capacidades en el seno de la cadena internacional de valor en que se inserten. A medida que la producción se desplace desde los productos básicos hacia las manufacturas, las estrategias sectoriales deberían aspirar a aumentar la agregación de valor nacional dentro de la cadena de valor. Sin dejar de mantener el carácter prioritario de la captación de IED, los planificadores deberían orientarse cada vez más a promover las alianzas de empresas del propio país.
Etapa de la innovación
En las fases finales del proceso de competitividad, cuando prima la innovación, las ventajas competitivas de los países residen en su capacidad para proponer productos y servicios novedosos y ubicarse en la vanguardia de la tecnología global
En esta etapa, las estrategias deberían centrarse en la divulgación tecnológica y el establecimiento de condiciones cada vez más eficaces para la innovación. Las instituciones de apoyo deberían intensificar su acción y ofrecer incentivos que refuercen la capacidad innovadora del sector empresarial. Habría que alentar a las empresas a competir sobre la base de estrategias únicas. Mejorar la capacidad de exportación de servicios debería ser un objetivo prioritario.
En todo caso, los planificadores no deberían esperar que el paso de una etapa a otra sea un simple trámite. En el Foro Ejecutivo de 2002, Peter Cornelius, del Foro Económico Mundial, dijo: “La transición entre las distintas etapas no es necesariamente lineal o gradual. Tampoco se da de forma automática.”
Progreso y tecnologías
Cualquiera sea la etapa de desarrollo de un país, el mejoramiento sostenido de las exportaciones depende de las tecnologías y la innovación. Ganeshan Wignaraja, Economista Jefe de Maxwell Stamp PLC, presentó al Foro Ejecutivo de 2002, en Montreux, un estudio sobre la industria de la confección de Mauricio. Al examinar los aspectos técnicos y de innovación, como la ingeniería de productos, gestión de calidad, nexos, inversión en capital humano y búsqueda de información, comprobó que éstos ejercían un efecto positivo y estadísticamente significativo sobre el resultado de las exportaciones de las empresas. Recomendó, pues, que los planificadores promoviesen la divulgación de tecnologías y la innovación por medio de:
- un acuerdo nacional de cooperación, complementado por medidas públicas y del sector privado.
- un enfoque de liberalización ‘avanzada’, que incluya medidas de incentivo y políticas relativas a la oferta.
- cuando sea económicamente viable, políticas que fomenten la competitividad de algunos núcleos industriales.
En conclusión la especialización cuenta, y mucho. Los países necesitan centrar su atención en sectores con un gran potencial de aumento del valor añadido. Por ende, crear ventajas competitivas en sectores de crecimiento debería ser una de las preocupaciones primordiales, no sólo de la empresa, sino también del Estado. Es decir, se necesita una firme alianza público-privada, para que lo dos crezcan y ganen es por esto que al realizar nuestra exportación de arequipe de café debemos ver los avances tributarios y las alianzas entre gobiernos para fortalecer nuestro producto a nivel nacional e internacional para ser más competitivos.
Las estrategias deberían centrarse en iniciativas “transversales”, en áreas como la financiación comercial, los aranceles, la logística y la infraestructura de las tecnologías de la información. Pero las prioridades deberían determinarse en función de las necesidades específicas de los principales sectores de crecimiento, las prioridades de los clientes (por ejemplo, las PYME y los inversores extranjeros directos) y los mercados meta.

http://www.intracen.org/execforum
http://www.intracen.org/menus/countries-s.htm
EL DOBLE DIAMANTE GENERALIZADO
Se considera que la competitividad de un país depende del diamante nacional y del diamante extranjero donde interactúan sus empresas. Los directivos se apoyan en los diamantes locales y extranjeros para ser competitivos internacionalmente en términos de supervivencia, beneficios y crecimiento.
Este modelo fue desarrollado por Moon, Rugman y Verbekeç (1995) para cubrir algunas debilidades del diamante de Porter e incorporar la actividad multinacional y el Gobierno dentro del modelo, y no como parámetros exógenos al mismo. Los autores plantean que en un país el valor añadido sostenible resulta tanto de las empresas locales como de las extranjeras en propiedad.
Adicionalmente, la Actividad multinacional, ya sea dentro o fuera, es importante para la competitividad de una nación o región, ya que afecta a todos los determinantes del diamante. Quizás, este parámetro de la actividad multinacional constituye la diferencia más importante de
Este modelo con respecto al diamante de Porter.
La figura muestra el doble diamante generalizado propuesto por Moon, Rugman y Verbeke (1995), donde la parte externa representa el diamante global y la parte interna el diamante local. El tamaño del diamante global es fijo dentro de un período predecible, pero el tamaño del diamante local varía de acuerdo a las dimensiones del país y a su competitividad. El diamante de la línea de puntos trazada entre los dos diamantes citados es un diamante internacional que simboliza la competitividad de una nación, determinada tanto por parámetros locales como internacionales. La diferencia entre el diamante internacional y el local representa, por consiguiente, las actividades internacionales o multinacionales. Las multinacionales incluyen tanto la inversión directa extranjera en el país local como la inversión directa en el país extranjero.
En el modelo del diamante generalizado, la competitividad nacional se define como la capacidad de las empresas para mantener el valor añadido a largo plazo a pesar de la competitividad internacional. Teóricamente, es importante destacar dos diferencias metodológicas entre el diamante de Porter y este nuevo modelo.
· El valor añadido sostenible en un país específico podría resultar tanto de las empresas en propiedad locales como extranjeras. Porter, sin embargo, no incorpora las actividades extranjeras en su modelo y hace una distinción entre el alcance geográfico de la competencia y el lugar geográfico de la ventaja competitiva (Porter y Amstrong, 1992).
sostenibilidad podría requerir una configuración geográfica que se extendiera a muchos países, donde la empresa específica y las ventajas de localización presentes en varias naciones podrían complementarse mutuamente.
orter (1986, 1990) argumenta que la mayor parte de la estrategia global efectiva consiste en concentrar tantas actividades como sea posible en un país y servir al mundo desde su base local.
la empresa global de Porter es sólo un exportador y su metodología no tiene en cuenta las complejidades organizativas de las operaciones realmente globales realizadas por las empresas multinacionales (Moon, 1994).
Fuente
http://www.eumed.net/tesis/rrr/1.pdf
¿QUÉ ES EL INFORME MUNDIAL DE COMPETITIVIDAD?
- Es el informe mundial más prestigiado sobre competitividad, definida como “el conjunto de instituciones, políticas y factores que determinan el nivel de productividad de los países”.
- La productividad refleja el nivel sustentable de prosperidad (crecimiento) que puede alcanzar la economía de un país.
- La competitividad de las economías produce mayores niveles de ingresos para los ciudadanos de los países.
¿CÓMO ESTÁ HECHO?
- Datos oficiales sobre diversos aspectos que inciden en crecimiento económico de los países.
- Encuesta mundial de ejecutivos (8.729 líderes de opinión)
- La cobertura abarca 104 países.
¿QUÉ INCLUYE?
- 2 rankings tradicionales:
- Growth Competitiveness Index (GCI)
- Business Competitiveness Index (BCI)
- Global Competitiveness Index (GlobalCI)
Aborda los factores claves de competitividad macroeconómica. Mide 3 elementos:
En las economías más atrasadas cada factor es ponderado en 1/3. En las economías más adelantadas la ponderación es 1/4 para los dos primeros y 1/2 para el tercero.
Aborda los factores claves de competitividad microeconómica. Mide 2 elementos:
- La sofisticación de las operaciones y estrategias empresariales
- El ambiente de negocios existente en cada país.
- La ponderación de los dos factores no difiere entre los tipos de economía: 7/10 para el primero y 3/10 para el segundo.
ARTICULO: SPECIAL REPORT OF WORLD ECONOMIC FORUM GLOBAL COMPETITIVENESS REPORT “COLOMBIA MEJORA SU COMPETITIVIDAD”
Colombia ha venido mejorando su competitividad el último año, mientras Brasil, Méjico y la mayoría de los países de Latino América la han venido perdiendo. Mientras tanto Chile, se mantiene constante como el más competitivo de la región.
Gracias al mejoramiento de las instituciones públicas y de su ambiente macroeconómico, Colombia ha escalado en el ranking de los países más competitivos del mundo, y especialmente en Latino América.
Ningún otro país de Latino América ha tenido tal progreso. Colombia ha sido uno de los tres países que más ha mejorado su competitividad en el año pasado. Honduras salto cuatro puestos en el ranking, mientras Argentina se movió dos puestos hacia arriba en la misma escala.
Colombia es ahora más competitivo que países como Trinidad y Tobago, y Croacia, de acuerdo a lo que revela el Reporte Global de la Competitividad de 2005-2006; reporte desarrollado en Suiza y basado en un Reporte Económico Mundial.
Este reporte mira aspectos como el ambiente macroeconómico de los países, así como la calidad de sus instituciones publicas y su desempeño, y como apuntalan los procesos para desarrollo económico de las naciones; el grado de desarrollo tecnológico del país, sus niveles de adaptación y de respuesta a los cambios tecnológicos mundiales y su capacidad de innovación. Esta medición se basa en encuestas a más de 11.000 líderes de negocios en 117 países.
La calificación o índice con que se mide a las entidades públicas de Colombia, pasó de 4.25 en el año anterior a un 4.55 en el presente año. Su ambiente macroeconómico, creció de un puntaje de 3.67 a 3.95 el mismo período. En efecto, Colombia se clasificó tercero (después de Chile y Uruguay) en la calificación de las instituciones públicas de los países de América Latina, y se clasificó cuarto en el ambiente macroeconómico de la región. En materia de instituciones publicas, Colombia se situó por encima de países como la India y la China.
La calificación a las entidades públicas, analiza factores como la corrupción; la transparencia en las licitaciones y solicitud de ofertas; el respeto por la propiedad privada; la independencia judicial y el desgreño administrativo o derroche de los gobiernos. La medición del ambiente macroeconómico mira las tendencias recesivas; el clima para los negocios; la disponibilidad de crédito; la cantidad y calidad de la inversión pública; y la tasa de inflación, entre otros factores.
La mejoría en la calificación y desempeño de sus instituciones públicas y el indudable ambiente macroeconómico favorable, compensaron o subsanaron, en parte, un deslucido avance en tecnología, que pasó de un puntaje de 3.60 a 3.01.En esta escala regional, Colombia se sitúa en el puesto 11.
Considerando todas estas mediciones, Colombia pasó del puesto 57 al 50, en la escala mundial de la competitividad.
E mejoramiento de las calificaciones de competitividad para Colombia, explica que en el país se ha incrementado notablemente la inversión extranjera, incluyendo, por ejemplo, la venta de la cervecera Bavaria, a la gigante SABMiller, por 5.6 billones de dólares.
A pesar de su declinación en la escala mundial, Chile se mantiene como el más competitivo de los países de América Latina. De hecho, la brecha entre este país y el segundo más competitivo comercialmente en Latinoamérica, ha crecido a lo largo del año pasado. Una característica o comportamiento, no visto en ninguna otra región del mundo, según lo expresa Augusto López Claro, economista en jefe del Foro Económico Mundial.
“El país (Chile) continúa beneficiándose por la combinación de un notable manejo de su competitividad económica, sumado a un excelente nivel e eficiencia y transparencia de sus entidades publicas”, dice López Claro en el reporte, y agrega “ciertamente, solo 8 países de la Unión Europea cuentan con tan alto índice de calificación para sus instituciones públicas”.
Chile es también más competitiva que países como Israel, Hong Kong y Kuwait, según nos muestra la tabla.
Chile cayó un lugar en le ranking mundial, del puesto 22 al 23, mientras que su puntaje bajo de 5.01 a 4.91, pero la diferencia con el siguiente país, creció al pasar de 26 puestos el año pasado a 31 en este año.
El puntaje de Chile en tecnología y en sus instituciones públicas, cayó, pero creció la evaluación de su ambiente macroeconómico.
En Latino América, 14 de los 18 países incluidos, mostraron declives comparados con el año anterior. La República Dominicana cayó en el ranking mundial, 30 puestos, seguida de Guatemala (17 puestos), Panamá (15 puestos) y Costa Rica que cayó también 14 escalones. Ecuador y Paraguay cayeron 13 lugares cada uno. Otras caídas fueron registradas por Brasil, Méjico, Uruguay y Venezuela. La República Dominicana vio particularmente dura su caída en tecnología y en sus instituciones públicas.
Las dos más grandes economías de América Latina, Brasil y Méjico, a pesar de registrar caídas en tecnología y en sus instituciones públicas, ganaron en su comportamiento macroeconómico.
“En Brasil, la confianza en los negocios puede verse seriamente afectada por el debilitamiento de la coalición de gobierno, como consecuencia de los escándalos de soborno y otras eventos, los cuales que afectan la imagen de las instituciones públicas del país” dice López Claro,“en Méjico, crece la incertidumbre política por las elecciones presidenciales del 2006, y la parálisis derivada de la campaña política, que enrarecerá la atmósfera de los negocios”.
Mientras tanto, Venezuela continúa su caída hacia el fondo de la lista.
“Venezuela presenta un extraordinario desempeño impulsado por los excelentes precios del petróleo; sin embargo, los gobiernos han manejado déficit presupuestales por varios años, lo que sugiere masivo derroche de los recursos del estado” dice López Claro. Y continúa: “se tiene una de las peores inflaciones en el mundo (115avo puesto) y logra la dudosa distinción de tener una de las peores imágenes sobre confianza en el respeto a la propiedad en el mundo (117avo). Venezuela es hoy, el menos competitivo de los países comparable con Uganda y Nigeria, de acuerdo a la tabla de competitividad.
Entre tanto, Paraguay (el menos competitivo de América Latina) se coloca debajo de países como Zimbabwe y Etiopía.
Uruguay mantiene su ranking, a pesar de la caída en su puntaje, Sin embargo, debido al largo declive sufrido por Méjico, Uruguay pasa al segundo lugar en competitividad en América Latina después de Chile.
Este informe demuestra que la competitividad de Colombia ha mejorado y ha tenido un notable crecimiento, ya que A nivel mundial, en cuanto a inversión en investigación y desarrollo, el Global Competitiveness Report califica a Colombia con 3,4 (un punto por encima de la media) superando a países como: Chile, México, Argentina e Indonesia, entre otros, y ubicandose en la posición número 39.
Claro que cabe aclarar que uno de sus fuertes esta en el mercado de servicios a las empresas ya que, el sector de los servicios a las empresas en Colombia ha experimentado un enorme auge y constituye actualmente uno de los sectores más dinámicos de la economía.
Colombia cuenta con amplias ventajas competitivas que le permiten al inversionista un retorno seguro y amplias posibilidades de inversión, aunque esto suena muy bien para el pais refleja que hay que seguir trabajando para lograr ser mas competitivos en lo que refiere al sector productivo es deicir crear mas estrategias que permitan a Colombia situarse en un puesto mas alto del ranking mundial de este estudio.
FUENTE:
http://www.proexport.com.co/VBeContent/library/documents/DocNewsNo5709DocumentNo5583.PDF
QUE EL WORLD COMPETITIVENESS YEARBOOK
El elabora un ranking de los 60 países y regiones más competitivos, basándose en 312 criterios agrupados en cuatro factores principales (cada unos de ellos subdividido en cinco más):
- Gestión económica (Economía doméstica, comercio internacional, inversión internacional, Empleo, Precios, inflación, coste de la vida...)
- Eficacia del Gobierno (Finanzas públicas, Política fiscal, Marco institucional, Legislación empresarial)
- Eficiencia empresarial (Productividad, Mercado de trabajo, Finanzas, Actitudes y valores)
- Infraestructura Básica (terreno arable, urbanizable, población, transportes, infraestructura energética...)
- Infraestructura tecnológica (Infraestructura científica, Salud y medioambiente, Educación).
Además, hay una nueva herramienta, “Rankings consolidadados”, que permite crear un ranking basado en una selección propia de criterios y países o consultar los creados por WCY.
Hay otras 2 formas de acceder a la información:
- Perfiles por países: permite visualizar la toda la información de un país
- Criterios: permite visualizar un criterio para todos los países o realizar una selección personal
ARTICULO DE COMPETITIVIDAD EN COLOMBIA
El sector de los servicios a las empresas en Colombia ha experimentado un enorme auge y constituye actualmente uno de los sectores más dinámicos de la economía.
Colombia cuenta con amplias ventajas competitivas que le permiten al inversionista un retorno seguro y amplias posibilidades de inversión.
. El mercado de servicios a las empresas en el mundo:
En los últimos años se ha dado un crecimiento acelerado en la subcontratación de servicios a las empresas entre países desarrollados y países en desarrollo, lo que comúnmente se conoce como Offshore Outsourcing.
Estos servicios pueden clasificarse en dos grandes categorías: La primera categoría está relacionada con servicios tecnológicos, entre los que destaca el desarrollo de software, el monitoreo remoto de redes y aplicaciones y los servicios de ayuda tecnológica. La segunda categoría consiste en la tercerización de procesos de negocio, más conocida como Bussines Processing Outsourcing (BPO)1. Generalmente se trata de procesos como atención a clientes, servicios de voz provistos por centros de llamadas, servicios de asesoría empresarial, contabilidad, publicidad, arquitectura, ingeniería, servicios legales y de procesamiento de documentos.
El mercado mundial de los servicios a las empresas es uno de los mercados con más amplia proyección y se caracteriza por su crecimiento acelerado. Se estima que los ingresos totales pasarían de US$ 296 mil millones en 2003 a US$ 400 mil millones en
20072. (Ver Gráfico 1). Por una parte, se espera que el mercado global de los servicios de tecnologías de información pase de US$ 175 mil millones en 2003 a US$ 236 mil millones en 2007, con un crecimiento anual compuesto de 7.8%3. Por su parte, el outsourcing de procesos empresariales crecería de US$ 121 mil millones en 2003 a US$ 173 mil millones en 2007, con un crecimiento anual compuesto de 9.3%4
Según el World Competitiveness Yearbook 2006 –elaborado por el IMD, Colombia ocupa la segunda posición de Suramérica en disponibilidad de trabajo altamente calificado, y el puesto número 23 en un ranking de 60 países.
En cuanto a habilidades técnicas, de acuerdo con el World Competitiveness Report
(2006), Colombia es entre sus competidores20 junto con Argentina, el país con mayor calidad en la educación de matemáticas y ciencias después de Costa Rica, lo que por ejemplo favorece el crecimiento del sector de Tecnologías de Información.
Colombia está entre los países con costos de telecomunicaciones más favorables de
América latina, dentro de los cuales se destacan: los costos de telefonía móvil.
Este informe tiene una gran ventaja y es que logra demostrar el crecimiento de un país en un profundo estudio a través de numerosas variables que le han permitido a Colombia demostrar su fuerte a nivel mundial, es decir estos estudios logran identificar como un país tiene la posibilidad de aprovechar sus puntos fuertes en el entorno global.
FUENTE
www.crt.gov.co
www.mincomunicaciones.gov.co
Fuente: The World Competitiveness Yearbook 2006-IMD
www.proexport.com.co\inversion